viernes, 5 de marzo de 2010
Pancho Fierro - Francisco Fierro Palas (1807 - 1879)
Los datos biográficos de Pancho Fierro con que se cuenta son escasos e incompletos y muchos de ellos, al no poder ser corroborados por documentos, pertenecen al plano de la tradición y la leyenda. Se sabe, por ejemplo, que su padre se llamaba Nicolás y su madre Camen; que se casó con Gervasia Cornejo y que tuvo tres hijos: un varón que murió siendo soldado y dos mujeres cuyo rastro se ha perdido. Lo qué han podido establecer sus biógrafas es que Pancho Fierro nació en Lima hacia 1807-1809 y todos están de acuerdo en que su muerte se produjo el 28 de julio de 1879, víctima de una pulmonía, cercano a los 70 años de edad.
Descripciones de la época señalan que era mulato o, como se conoce en el lenguaje vernacular, de "color honesto", de mediana estatura, grueso, de barba cerrada; y que se destacaba por su agudeza y habilidad. Su espíritu inquieto y la necesidad lo llevaron a cambiar varias veces de domicilio en Lima; incluso existen versiones de que habitó en diversos lugares de los barrios tradicionales de entonces, como el Cercado y el Rímac .
Fué un pintor autodidacta ,casi todas sus acuarelas fueron elaboradas sobre cartulina corriente y en formato pequeño.
La obra de Pancho Fierro, trabajada mayoritariamente en acuarela, sobrepasa las 1.200láminas que hoy día integran importantes colecciones estatales y particulares del Perú y el mundo.
La habilidad y su preferencia costumbrista lo convirtieron en un gran conocedor y amante de Lima que, por aquellos años, era una ciudad que respiraba una mezcla de religiosidad y criollismo, en la que la vida diaria transcurría plácidamente entre iglesias, plazas, tertulias, corridas de toros, jaranas, conspiraciones políticas y coqueteos femeninos. Esa Lima bulliciosa, coqueta, pícara si se quiere y de una irreverente y despreocupada alegría, fue el blanco de su talento observador. En cada una de sus estampas, Pancho Fierro ha legado una imagen latente de la Lima de antaño, criolla y zalamera, a la que conoció y amó en profundidad.
Pancho Fierro, reconocido como un artista genial y travieso, es quien a la postre lega a la posteridad una imagen fidedigna de la Lima del 800. De su obra nos nutrimos para conocer nuestro pasado y para rescatar aquellas tradiciones que aún caracterizan y distinguen a la ciudad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario